Nicola Napolitano nació en Casale di Carinola (Caserta) en 1914 y murió en Formia en 2003.
Entre otros libros, ha publicado: Non si torna indietro, Viandante y Disegnare il tuo nome.
ISLA DE CRETA
(septiembre de 1943)
En esta abrupta roca
me atenazan las tinieblas,
áspero y titánico fragor
mareas aullantes se rompen a mis pies.
¿Mi madre?
Más allá del mar hostil,
más allá del tiempo falaz
que se desmorona en este escollo.
Y mi inocencia
suavísima resurge
en estos jirones de vida
que la muerte ha rechazado.
Oh niñez luminosa y jovial,
pespunteada de remotas lejanías,
¡qué radiante te vuelvo a ver
en esta oscuridad!
El desasosiego me lleva
a encontrarme a mí mismo en los recuerdos.
Mamá,
en brazos me tenías
pendiente de tus cuentos,
y no era soldado en el Egeo
de una guerra perdida.
ISOLA DI CRETA
(settembre 1943)
Su questa roccia scabra
mi attanagliano le tenebre,
aspro titanico fragore
marosi urlanti rompono ai miei piedi.
Mia madre?
Di là dal mare ostile,
di là dal tempo infido
che frana a questo scoglio.
E l'innocenza mia
soavissima riaffiora
in questi cenci di vita
che morte ha rifiutati.
O fanciullezza luminosa e gaia,
trapunta di remote lontananze,
come radiosa ti rivedo
in questo buio!
Smarrimento mi scioglie
a ritrovar me stesso nei ricordi.
Mamma,
in braccio mi tenevi
sospeso alle tue fiabe,
e non ero soldato in Egeo
d'una guerra perduta.
Entre otros libros, ha publicado: Non si torna indietro, Viandante y Disegnare il tuo nome.
ISLA DE CRETA
(septiembre de 1943)
En esta abrupta roca
me atenazan las tinieblas,
áspero y titánico fragor
mareas aullantes se rompen a mis pies.
¿Mi madre?
Más allá del mar hostil,
más allá del tiempo falaz
que se desmorona en este escollo.
Y mi inocencia
suavísima resurge
en estos jirones de vida
que la muerte ha rechazado.
Oh niñez luminosa y jovial,
pespunteada de remotas lejanías,
¡qué radiante te vuelvo a ver
en esta oscuridad!
El desasosiego me lleva
a encontrarme a mí mismo en los recuerdos.
Mamá,
en brazos me tenías
pendiente de tus cuentos,
y no era soldado en el Egeo
de una guerra perdida.
ISOLA DI CRETA
(settembre 1943)
Su questa roccia scabra
mi attanagliano le tenebre,
aspro titanico fragore
marosi urlanti rompono ai miei piedi.
Mia madre?
Di là dal mare ostile,
di là dal tempo infido
che frana a questo scoglio.
E l'innocenza mia
soavissima riaffiora
in questi cenci di vita
che morte ha rifiutati.
O fanciullezza luminosa e gaia,
trapunta di remote lontananze,
come radiosa ti rivedo
in questo buio!
Smarrimento mi scioglie
a ritrovar me stesso nei ricordi.
Mamma,
in braccio mi tenevi
sospeso alle tue fiabe,
e non ero soldato in Egeo
d'una guerra perduta.